Al parecer el defensor del pueblo, Wilian León Huertas, encontró las pruebas suficientes que tanto exigía para intervenir en el caso del supuesto proselitismos de nuestro Alcalde Cesar Acuña Peralta; por sus respectivas visitas a los diferentes territorios vecinales de la ciudad, a vísperas de los comicios electorales para elegir a los dirigentes vecinales, que trabajarían en coordinación con el burgomaestre.
Cabe indicar que la defensoría que es una institución autónoma, no se ha prestado a participar de este juego sucio del proceso; después de haber observado detenidamente las irregularidades que se han venido dando hasta el momento, entre ellas la entrega a destiempo de los padrones electorales para su debida depuración, a lo que se suma la obtención de un video donde se observa a Máximo Ascate (territorio 34) candidato de alianza para el progreso participando en una de las obras junto a la Alcalde de la Municipalidad.
Las “buenas intenciones” que dice tener Acuña al hacer esta visita es conocer las necesidades y problemas de los vecinos así como de invitar a los electores a que no falten a sufragar. Por favor señor alcalde, ¿A quien pretende engañar? ¿Por qué justo cuando faltaban unas semanas para tales comicios, de un momento a otro, le nació el espíritu edil?
Han pasado un año cinco meses tiempo en el que se pasó viajando por diferentes partes del mundo, después de movilizarse en una camioneta con lunas polarizadas, entrando y saliendo de la Municipalidad como si fuera uno más de sus locales políticos.
Si el señor Acuña pretende que su partido gane todos o la mayoría de las juntas vecinales, está en su derecho. Pero que lo haga con el dinero de su partido, con la infraestructura de su partido, con sus militantes, con sus bases.
No se han puesto a pensar de donde financia las unidades móviles, combustible, personal, equipos de sonido, etc. Pues con el dinero del pueblo que lo eligió. Para colmo no le bastó utilizar a sus estudiantes (de la Vallejo) para la campaña electoral; sino que ahora son sus propagandistas andantes a los que les coloca lemas en pecho y espaldas (polos, chalecos, mochilas, gorros, etc.), solo falta cintas en la frente. Pero estos jóvenes lo hacen por necesidad, para que les reduzcan la pensión o dándoles opciones de trabajo de medio tiempo. Lo que esta logrando es crear una juventud mediatizada.
Con que autoridad moral viene a tildar a los regidores como sinvergüenzas y estafadores, cuando él (Acuña) tiene en la municipalidad una agencia de trabajo formada por estudiantes vallejianos con el cuento de que son más técnicos para el desarrollo de Trujillo, para su “gran cambio”. El burgomaestre mira la paja en ojo ajeno.
En esta ciudad de apristas acérrimos donde se gobernado por mas de 50 años con la ideología tan mediatizada los trujillanos no se perdonan que un personaje externo al partido allá llegado a obtener el sillón municipal, tal vez por eso se le ataque diría él. Pero Ing. Acuña no nos hagamos los tontos usted también da razones, con las “grandes obras” que realiza, el pintado por toda la ciudad y sus alrededores con los colores que identifica a su partido, querer modificar el logo de la municipalidad provincial de Trujillo y ahora su proselitismo.
Lo único que pretende es sacar beneficio político y personal de nuestra ciudad, sin importarle en absoluto el verdadero significado histórico que representan para los verdaderos trujillanos, los símbolos que durante siglos nos ha identificado.
Es así que el Alcalde de Trujillo, con su aparente humildad y sencillez, pretende una vez más embelesar con sus obras de caridad a los trujillanos; pero la verdad es que no se ha dado cuenta que el pueblo trujillano ya no es ingenuo, y que no cree en falsas promesas.
Publicado por: Viviana Arteaga Sotomayor y Belissa Mixán Sánchez
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